Hay dos formas de cargar un vehículo híbrido enchufable y es por medio de un cargador, público o doméstico, y mediante la recuperación de energía durante las desaceleraciones; sin embargo, Mercedes-Benz propone una tercera, divertida, opción: ¡por medio del drifting!
Esta opción estará disponible para la familia Mercedes-AMG E Performance, los híbridos más radicales de Mercedes-Benz. Sí leíste bien.
Hace un par semanas Mercedes-Benz dio a conocer la estrategia de electrificación, específicamente para sus modelos más deportivos, los firmados bajo el nombre Mercedes-AMG E Performance, los cuales se verán altamente favorecidos a lo aprendido en la “era híbrida” de la Fórmula 1 los últimos años.
Parte de esa experiencia se materializará, entre otras muchas ventajas reales, en un modo de conducción que permitirá recargar la batería haciendo drifting, es decir, haciendo derrapes.
Se trata de una función llamada ‘Drift-to-charge‘ y está basada en la tecnología que utiliza Mercedes en la Fórmula 1.
De acuerdo con Jochen Schmitz, desarrollador del sistema híbrido, el software del E Performance está diseñado para permitir la recuperación de energía también durante una derrapada continuada.
En el video compartido por la marca Schmitz asegura:
“Usamos el sistema eléctrico para reducir la velocidad o quitarle la carga al motor de combustión interna, poniéndola en la batería. Y entonces, cuando el deslizamiento -drifting- termina, el motor de combustión interna ya está a plena carga y puedes acelerar mucho más rápido”
Es decir, el motor de combustión interna no sólo no reduce su potencia, sino que recarga la batería mientras el coche derrapa; y, por si fuese poco, esto permite salir más rápido después gracias al impulso de la parte eléctrica.
Por el momento Mercedes-Benz ha presentado dos primeros modelos con esta tecnología: por un lado, el Mercedes-AMG GT 73 E Performance 4MATIC con un motor que desarrolla 816 Hp de potencia que se desarrollan gracias a un V8 biturbo y uno eléctrico que da poco más de 200 caballos de potencia.
El segundo modelo será el próximo Mercedes-AMG C63 E Performance, que abandonará el motor V8 de la generación actual para dar cabida a un sistema híbrido enchufable con un motor 2.0 gasolina de 4 cilindros, con menos apetito de gasolina y con menores emisiones que el V8, combinado también con un motor eléctrico que serán capaces de entregar conjuntamente más de 600 caballos.
