Hace cuatro meses se dio el anuncio: dos gigantes de la industria automotriz unirían fuerzas. Bugatti y Rimac combinan su expertise en una empresa en conjunto, pero a la vez separada.
Bugatti-Rimac está, oficialmente, en funcionamiento con sede en Sveta Nedelja (Croacia) y Mate Rimac asumiendo el cargo de CEO. Comienza una nueva era para los coches hipereléctricos.
Tanto Bugatti como Rimac continuarán actuando como marcas independientes: conservarán sus centros de producción y canales de venta, sin embargo, todo parece indicar que Bugatti sería la mas beneficiada ya tendrá acceso a toda la tecnología eléctrica de alto rendimiento de Rimac.
Lo anterior, podría resultar en un potencial reemplazo para su emblemático motor W16 que sería sustituido en, al menos, en un Bugatti híbrido y, casi seguro, en uno eléctrico.
El nuevo matrimonio, Bugatti-Rimac está conformado con la participación mayoritaria de la segunda, que posee el 55% de las acciones. Por ahora, la compañía contará con una plantilla formada por 435 empleados: 300 estarán ubicados en Zagreb (Croacia), 135 en Molsheim (Francia) y otros 180 empleados estarán en el centro de desarrollo, ubicado en Wolfsburgo (Alemania).
A partir de 2023, la sede se trasladará a un nuevo campus que están construyendo a las afueras de la capital croata con capacidad para 2,500 personas.
El fundador y CEO de Rimac Automobili, Mate Rimac ocupará el cargo de director de Bugatti-Rimac, pero no estará sólo, estará acompañado por un consejo formado por altos cargos de Porsche: como Oliver Blume (presidente) y Lutz Meschke (vicepresidente).
Sin duda, estamos viendo el nacimiento de una nueva etapa en la industria automotriz, nuevas reglas, nuevos límites y nuevas sensaciones se están gestando.