El afamado diseñador libanés tuvo la genial de idea de vestir  de princesas de cuento de hadas a las pequeñas de la casa con réplicas de los vestidos lucidos por las modelos. Una gran sorpresa que nos dejó sin palabras.

La pasarela no pudo ser más brillante, elegante y mágica no sólo por los preciosos diseños, sino para la magia que emanan de cualquier niño y más si porta una creación que haría palidecer de envidia a cualquier princesa de película.

El creador claramente apostó por una mujer seductora y elegante, a la vez que misteriosa, donde las joyas han cobrado especial importancia, que fueron acompañados por flores superpuestas, plumas, animales en forma de joya, espectaculares pendientes largos y cinturones de ante a juego con el color predominante del vestido.

¡Elie Saab no nos defauda nunca!madre-hija2.jpgmadre-hija1.jpg

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