El pasado mes de junio Amazon invirtió $1,300 millones de dólares en la compra de Zoox, una startup que ya llevaba seis años desarrollando un vehículo autónomo y eléctrico dedicado al transporte de pasajeros.
Una inversión de esta magnitud no se hace a la ligera y los primeros frutos ya florecieron con el primer prototipo que, en no mucho tiempo, debería permitir a Amazon desplegar una flota de “Robotaxis” en las principales ciudades del mundo.
De acuerdo con Amazon este vehículo sin conductor destinado al transporte de pasajeros tiene una dimensión de 3.63 metros de longitud, con gran distancia entre ejes, y un habitáculo con espacio para cuatro personas. Aunque la compañía asegura que podría emplearse también como vehículo autónomo de reparto.
Un detalle importante es que este taxi eléctrico será capaz de transportar pasajeros de un lado para otro durante 16 horas de forma continua. La velocidad máxima de este vehículo está limitada a 120 km/h.
Los prototipos de este taxi autónomo ya están haciendo pruebas intensas en algunas zonas de Las Vegas y San Francisco, así como en los alrededores de la propia sede de la compañía en Silicon Valley, con la intención de lanzar un nuevo servicio de taxis autónomos lo más pronto posible.