“En Tamazula, la mujer es tan dulce como su caña, pero tan brava como su salsa”, esa famosa regla no sabemos si sea cierta. Lo que sí, es que el chile, es un ingrediente que difícilmente pasa desapercibido y así lo entendió Manuel Maciel Méndez, creador de la Salsa Valentina. Él, originario de Guadalajara, Jalisco, inventó este producto que engalana hasta las alacenas más refinadas.
Ya sea en fruta, papas, palomitas, cacahuates o lo que se agregue, siempre la presencia de esas notas… un tanto picantes, acompañan, enamoran y hacen sudar a cualquiera. Y todo esto en tan solo una botellita de 350 ml de sabor puro mexicano.
Los chicharrones siempre saben mejor si los acompañas con Salsa Valentina. 😌😋 pic.twitter.com/NIHgNh1mNi
— Salsa Valentina (@salsaValentina) September 29, 2022
¿Por qué se llama salsa Valentina?
Quizá, Grupo Tamazula, nunca imaginó lo popular que se convertiría su “salsa”, que ya es parte de la cocina tradicional mexicana. Y aún más, por el nombre que hace honor a una mujer que se enlistó con tan solo 17 años a las fuerzas Maderistas en la época de la Revolución. Sí… vestida de hombre, algo muy inusual y controvertido para la época.
Juan Ramírez, era el nombre con el que se le identificaba en las fuerzas revolucionarias, logrando al año, nada más y nada menos que el cargo de teniente. Posteriormente expulsada debido a que fue descubierta por uno de sus compañeros, mientras dejaba sueltas por un instante y de manera accidental… ¡su par de trenzas!
Valentina Ramírez Avitia, su nombre real, murió el 4 de abril de 1979, tras ser atropellada por un coche. Sus restos descansan en una fosa común en un panteón de Culiacán, Sinaloa.
Un producto mexicano 100% internacional
Pero aún preguntamos, ¿qué hace tan famosa y popular a la salsa Valentina?
Seguramente, es la mezcla de chiles secos puya, con chiles serranos, vinagre, sal y especias. Combinación que ha rebasado fronteras, convirtiéndola en la consentida y preferida por millones de mexicanos y también por la gente de California, Illinois, Texas, Canadá, España y China, país donde ocupa el segundo lugar en ventas, sobre otros artículos picantes. Sin duda, y cómo no, la presencia mexicana… siempre rebasa fronteras.
Es así, como Valentina, la salsa más mexicana, creada en 1960, en cuya etiqueta se encuentra plasmada la silueta del estado de Jalisco, le rindió homenaje a una mujer por su tenacidad revolucionaria. A una persona que quizás, nunca imaginó, que su nombre estaría escrito con letras de oro en la cultura gastronómica de todos los mexicanos. Y que a la postre, sería un referente hasta nuestros días. ¡Provecho!
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